Alguien ha abandonado la vida. Su crítica, mofa reflejada, obsesiona la metamorfosis y asesina la compañía. Se envuelven el rechazo y el amor, sus imitaciones secundarias que aseguran un fin placentero; nombre de su caos repentino. En el miedo se estudian: su inocencia es una herida de endeble malicia, abierta en la decepción. Huye ignorandoSigue leyendo «Poema a la nueva especie»
Archivo del autor: H. M. Huízar
Otro estado para los estadounidenses
—Esta estación tiene de todo, Raúl, de todo menos café. Ambos andaban por un largo pasillo blanco. Al caminar, dejaban atrás varias habitaciones, cada una repleta de reporteros bebiendo agua de tasas color marrón: el color de la compañía. —Tengo seis hijos, otro trabajo en la mañana y un largo camino a casa. Esta estaciónSigue leyendo «Otro estado para los estadounidenses»
Casa
Alejado de la cocina su mueble le abría la puerta, esperándola. Los escalones son una continuidad grisácea. Ella ha llorado viendo cuadros repetidos. Ahora duerme. Un libro evade su mano. En una cama húmeda, ambos se aman, ambos duermen en casa.
Log in and out
Los mitos del hombre perdido quieren tu correcta llamada, aquella que aleja innobles infancias. El paso que das, afirman, es el sollozo de una letra dormida. Gritan pecados para escucharte forzar una puerta que no abre. La indiferencia ondula entre los dedos de una perfecta deidad, derramando seducción con ambigüedad razonada. Acepta el arte oralSigue leyendo «Log in and out»
Desde el arbusto
Los niños jugaban a ver quién contaba la mejor historia de terror. Yo gané.
Losas
La sucia losa nunca quiso en su vida repetir formas.
T
Niña de tenis traviesos, tomas, tiras y atacas. Te dejan caer en tentación. Azota el suelo sacramental gritando, pataleando. “¡Tá desatada la niña!” Que nadie te detenga, Teté. Mucho menos el hombre con forma de te.
Cuentos
Se sueña en la noche (Fragmento) Desde el arbusto (microcuento) Otro estado para los estadounidenses Tumba moderna
La base secreta
Yo regalo, tú regalas, él relaga, nosotros regalamos, ustedes regalan. Alba le arrebató la hoja de sus manos y la decoró con otra tacha en un cuadro en blanco. Para hacerse creer que hacía su trabajo de maestra mantuvo la hoja entre sus manos y pasó la mirada por cada esquina. Natalia debía esperar unSigue leyendo «La base secreta»
A veces llegan cartas
Desdeño pétalos leales a un dios silencioso, oculto. El tallo habla su pluralidad, pronuncia el tiempo iluminado. A Xóchitl Carreón le gusta esto A Graciela Solórzano le gusta esto A Oscar Galindo Molina le gusta esto A Joshua Ivan Rosas le gusta esto A Antonio Rubio le gusta esto A Estefanía Moreno le gustaSigue leyendo «A veces llegan cartas»